Idiomas y Educación pide al Instituto Cervantes que defienda el español
La asociación pide al Instituto Cervantes que, además de promover el español en el exterior, también lo defienda en el interior, ya que no hay nadie que lo haga.
El pasado viernes 28 de abril, el director del Instituto Cervantes, Juan Manuel Bonet, anunció el presupuesto del Instituto Cervantes, de más de 120,5 millones de euros. De esa cifra, 52,4 proceden de ingresos de actividades propias pero hay 64 millones que proceden de transferencias del Estado.
¿Acaso nuestros hijos no merecen que se les defienda de este nuevo afán en la Comunidad Valenciana que pretende el exterminio del castellano? Los objetivos de la Consellería pasan por desplazar el uso de esa lengua para implantar el valenciano en plena inmersión, aspecto que restringe derechos y libertades a los ciudadanos. Esto no solo ocurre en esta comunidad.
Idiomas y Educación, desde el Foro por el Derecho a Elegir Lengua Vehicular, en el que participa con Concapa y Covapa, ha lanzado un proyecto crowdfunding en la plataforma Lánzanos.com en el que ya llevan recaudados 3.891 euros. Con ese dinero y un poco más… se pretende invalidar un decreto que lesiona derechos fundamentales y que genera desigualdades entre los niños, con la ayuda añadida de personas que dedican su tiempo libre a esta acción en defensa de los derechos de los ciudadanos y de la discriminación del castellano, lengua materna de muchísimos niños en esta Comunidad.
Idiomas y Educación fue creada en el último trimestre de 2016 para luchar contra el decreto de plurilingüismo, recientemente aprobado en la Comunidad Valenciana, y que se implanta con medidas de manipulación y chantaje, generando una gravísima confrontación entre ciudadanos.
Por otra parte se impone el requisito lingüístico en todos los ámbitos de la administración, sin respetar el uso de lenguas de las poblaciones, diferentes según el territorio, y se instalan carteles, señales de tráfico y todo tipo de distintivos, como el de la imagen adjunta, para que tanto en la actividad institucional como en la privada, solo se use la lengua valenciana. Incluso se pretende perseguir a las empresas que no instauren el valenciano como lengua para todo tipo de comunicaciones, cartelería y material corporativo.
Se trata de un asedio excesivo que requiere respuesta. El Instituto Cervantes está ligado al Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación, su objetivo es atender al patrimonio lingüístico y cultural que es común a los países y pueblos de la comunidad hispanohablante, pero no debe olvidar que España está sufriendo sucesivos ataques para que sus ciudadanos dejen de usar el idioma de Cervantes, lengua oficial en todo el territorio nacional. Es por ello que Idiomas y Educación sugiere, dado que el Ministerio parece que no tiene planes de defender esta lengua global que genera gran impacto económico en el país y que los padres la quieren para sus hijos, para que al menos se use algo de los fondos que el Estado transfiere al Instituto Cervantes para luchar contra el asedio, que también se da en Baleares, Cataluña, Galicia, Navarra y País Vasco.
Al mismo tiempo Idiomas y Educación sugiere al Instituto Cervantes que explique lo que es el DELE, diploma oficial del español que gestiona y evalúa el Instituto Cervantes aunque lo expide el Ministerio de Educación, de gran reconocimiento en Europa y en el mundo. Y si se da el caso, partiendo de lo que contempla el nuevo decreto en cuanto a certificados que se regalan en condiciones sospechosas de legalidad, para el valenciano y el inglés, esa institución debería analizar, y sugerir, la posible aplicación del correspondiente certificado de español para ser aplicado también como requisito lingüístico en todas las comunidades, o al menos que pudiera ser aplicado en aquellas en las que se ataca al castellano ante las presiones del nacionalismo radical, cuyo objetivo no es otro es convertir a los españoles en extranjeros, y que dejen de usar esta importante lengua internacional.